os sindicatos y la Administración llevaban tiempo alertando de que la crisis entrañaba el riesgo de que las empresas optaran por desatender algunos flancos como la prevención de riesgos laborales para optimizar sus escasos recursos económicos en otras tareas más productivas. La Memoria de la Fiscalía da fe de que al final ha ocurrido: a título de ejemplo, en Zaragoza los delitos contra los derechos de los trabajadores pasaron de 42 a 100 en un año. Y el 90% de ellos afectaba a la seguridad. A esa cifra hay que añadirle siete episodios de imposición de condiciones ilegales de trabajo.
(Fuente: LexNova)
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